Sueño y síndrome de Down

A lo largo de estos 5 años con Benjamín, me he podido dar cuenta de que no soy la única que batalla con él a la hora de dormir, simplemente le cuesta mucho trabajo dormir (ahora menos que antes). Durante el primer año de vida de Benjamín, dormir no fue un problema, por el contrario, recuerdo despertarlo muchas noches porque no si no lo hacía él podía pasarse la noche entera sin tomar leche, no se despertaba por nada.

El Sueño

Dentro de lo que cabe Benjamín ha sido un niño bastante sano, digo, ha tenido sus problemitas como todo niño, sobre todo al principio, por ejemplo, a los 4 días de haber nacido lo operaron de una atresia duodenal (por pancreas anular), por eso pasó casi un mes hospitalizado, luego tuvo una cardiopatía (PCA) que gracias a la medicina homeopática se corrigió y ya hubo necesidad de operarlo.

Tambien tuvo reflujo severo (tambien corregido con homeopatía) y gracias al tratamiento tambien se libró de ser operado, fuera de eso había estado muy muy bien, no se había enfermado hasta que un par de meses antes de cumplir su primer añito de vida se empezó a enfermar de unas fiebres horrendas (en varias ocasiones llegó a los 40ºC, gracias a Dios sin convulsionar!) que no cedían con nada y se le hicieron tooodo tipo de análisis y todos salían normales (incluso uno de los tantos doctores que lo atendió me dijo: «es que su niño es un enfermo sano»), se le daban tratamiento pero nada, el seguía con fiebre, hasta que nuevamente la homeopatía salió al rescate (con otro doctor) y después de casi 6 meses con fiebres se le quitó, peeeero no acabó ahí.