En definitiva nadie nos enseña a ser padres y ser madre (en la mayoría de los casos) es todo un reto, ya que en nosotras recae la responsabilidad mayor de criar a los hijos. De pequeña imaginaba el momento de ser madre y creía que todo era fácil, que era como se veía en TV o en los cuentos, por supuesto que jamás cruzó por mi mente la idea de tener que cambiar pañales (al menos hasta que llegó el primer sobrino a quien cambié), limpiar narices, atender enfermedades, pasar noches en vela, padecer sus dolores o molestias, estrujar el corazón cuando algo les pasa, angustiarme con cosas que salen de control y muchas cosas más.
Pero es todo esto lo que hace valorar en primer lugar el trabajo que mi madre hizo conmigo y agradecer infinitamente por aún tenerla en mi vida. En segundo lugar, me hace pensar en la maternidad, no es color de rosa pero no la cambiaría por nada, mis hijos son quienes le dan sentido a mi vida y espero durarles por mucho tiempo.
Un hijo siempre será un hijo, lo más valioso que se puede tener, nos hacen experimentar sentimientos jamás pensados, nos hacen verlos únicos, perfectos, no importa si para el resto del mundo no lo son, para nosotros siempre ocuparán ese lugar, son personitas que se apropian de nuestra vida entera, que la hacen mejor… mucho mejor.
Ser madre es un regalo, en ocasiones el cansancio y las ocupaciones no nos permiten apreciarlo en su totalidad, pero sin duda es un trabajo que se hace con todo el amor y tratando de no equivocarse (aunque no siempre lo logremos), la mejor recompensa es recibir el amor de los hijos y sus sonrisas a cambio.
FELIZ DÍA DE LAS MADRES !!!!
